Cocina VOGUE

Bienvenido a un excelente ejemplo de cocina que trasciende la utilidad básica para convertirse en un espacio asombroso de alto rendimiento y tan estéticamente agradable que podría haber servido de pasarela. El último proyecto de Annika Rowson es una celebración única de la elegancia minimalista, inconfundiblemente envuelta en una elegante modernidad. El ambiente es VOGUE.

Son muchas las características que merece la pena destacar de este proyecto, pero la pieza central es, sin duda, su isla. Curvada, acanalada y equipada con una encimera de piedra césar, es un elemento que a primera vista parece sencillo, pero que en realidad es una pieza cuidadosamente diseñada que dicta sutilmente el conjunto del espacio. Las flautas se reflejan en las vitrinas de cristal tallado, el tono azul marino se repite en la elegante pared del fondo y las suaves curvas contrastan con el estricto orden de su entorno. Sin darnos cuenta, estamos ante una sinergia visual en la que cada detalle está en sintonía.

Sin embargo, no hay desfile de moda sin drama, el componente inesperado se logra mediante el uso de grifería de latón y barras de bronce ahumado; lo suficientemente extravagante para agitar las cosas, lo suficientemente cortés para no causar una escena, y lo que nos encontramos es un espacio muy sofisticado, que irradia con gracia de moda.

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COCINA VOGUE