Qué vista...

Una de nuestras diseñadoras de interiores favoritas, Annika Rowson, vuelve con una cocina personalizada que marca la pauta para el resto de esta construcción en Muriwai, Nueva Zelanda. Rodeada de vistas al océano, colinas ondulantes y vertiginosos acantilados, el exterior revestido de madera de la casa es un tema que se extiende a los espacios interiores. El yeso veneciano y la madera se utilizan para enmarcar puntos específicos de la casa, incluida la cocina central.

Dentro del marco neutro se sitúan los armarios negros y las encimeras oscuras, que se animan con los herrajes de latón Buster + Punch, incluidas las barras de extracción y los pomos de los muebles. También se han añadido herrajes de latón a juego en el fregadero adyacente, uniendo los espacios a la perfección.